MEDARD BOSS

1903 – 1990

Dr. C. George Boeree

Traducción al castellano: Dr. Rafael Gautier



Resulta imposible imaginarse una mejor preparación en una carrera de psicoterapia. Nacido en St. Gallen, Suiza, el 4 de octubre de 1903, Medard Boss creció en Zurcí durante un tiempo donde la ciudad era el centro de la actividad psicológica. Recibió su licenciatura en Medicina en la Universidad de Zurcí en 1928, tomándose un tiempo en el camino para seguir estudiando en París y Viena y ser analizado por el mismo Sigmund Freud.

Después de 4 años en el hospital Burgholzli como asistente de Eugene Bleuler, se fue a estudiar a Berlín y Londres, donde varios de sus maestros pertenecían al círculo interno de Freud, como Karen Horney y Kurt Goldstein. Al inicio del año 1938 se asoció a Carl Jung, quien brindó a Boss la posibilidad de un análisis pero sin atarse a las interpretaciones freudianas.

Con el tiempo, Boss leyó los trabajos de Ludwig Binswanger y de Martin Heidegger. Pero no fue hasta un encuentro en 1946 y posteriormente una amistad con Heidegger lo que le volcaría definitivamente sobre la psicología existencial. El impacto de Boss sobre la terapia existencial ha sido tan grande que con frecuencia se le asocia a Ludwig Binswanger como co-fundador.

Teoría

Aunque Binswanger y Boss están de acuerdo con las bases de la psicología existencial, el último se acerca algo más a las ideas originales de Heidegger. Por ejemplo, Boss no comparte las ideas de Binswanger sobre “el diseño-del-mundo”: El cree que la idea de que las personas vienen al mundo con expectativas preformadas desvía la atención de un punto mucho más existencialista de que el mundo no es algo que interpretemos, sino más bien que se revela a sí mismo dentro de la “luz” del Dasein.

La analogía de la luz juega un papel importante en la teoría de Boss. Por ejemplo, el fenómeno “mundo” literalmente significa “brillar en expansión” o “salir de la oscuridad”, por lo que Boss considera al Dasein como una luz que permite que las cosas fluyan en su propio brillo.

Esta idea tuvo un profundo efecto sobre cómo Boss entendía muchas cosas como la psicopatología, las defensas, el estilo terapéutico y la interpretación de los sueños. La defensividad, por ejemplo, es una cuestión de falta de luz sobre algún aspecto de la vida y la psicopatología es análogo a escoger vivir en la oscuridad. Por otro lado, la terapia comprende revertir esta constricción de nuestra apertura básica o “¡Aclaración!”.

Una de sus sugerencias más importantes al paciente es “dejar que las cosas fluyan” (Gelassenheit). La mayoría de nosotros intentamos con mucho esfuerzo mantener las cosas bajo un estricto control. Pero la vida es demasiado para nosotros; deberíamos darle un poco de confianza al destino; saltar hacia la vida en vez de estar probando siempre el agua a ver si está caliente o fría. En vez de mantener la luz de Dasein muy focalizada, deberíamos dejar que brille más libremente.

Existenciales

A diferencia de la preferencia de uso del Umwelt por Heidegger, Mitwelt y Eigenwelt, Boss prefiere el término existenciales de Heidegger o aquellas cosas de la vida con las que todos tenemos que lidiar. En este sentido, Boss se interesa en cómo las personas perciben el tiempo y el espacio; no el espacio físico ni temporal medido en distancias y controlado por relojes y calendarios, sino por el espacio humano y el tiempo, por el espacio personal y el tiempo. Alguien de hace tiempo, que ahora vive muy lejos, puede estar más cerca de ti que la persona que tienes a tu lado en estos momentos.

También está interesado en cómo nos relacionamos con nuestros cuerpos. Mi apertura al mundo se expresará a través de mi apertura corporal y a mi extensión de mi cuerpo en el mundo, cosa que él llama “tendencia hacia adelante del cuerpo” (bodying forth).

Nuestra relación con los demás es tan importante para Boss como para Binswanger. No somos individuos atrapados en un cuerpo; más bien vivimos en un mundo compartido y nos iluminamos mutuamente. La existencia humana es una existencia compartida.

Una preocupación particularmente “bossiana” es el “humor” o “sintonización”: Boss sugirió que, aunque siempre estamos iluminando al mundo, a veces iluminamos unas cosas más que otras, o lo hacemos con diferentes matices. No es distinto a cómo intentamos lograr un cierto humor con una iluminación en nuestra habitación.

Por ejemplo, si tienes un “humor de perros”, estás “sintonizado” con las cosas rabiosas, pensamientos y acciones rabiosas; lo vemos todo “rojo”. Si estás con un humor alegre, estás entonces “sintonizado” con las cosas agradables y el mundo parece mejor. Si estás hambriento, todo lo que verás será comida; si es ansioso como estás, todo a tu lado será amenazante.

Sueños

Boss se ha dedicado a los sueños más que cualquier otro existencialista y los considera parte importante de la terapia, pero en vez de interpretarlos como hacen los freudianos y junguianos, permite que revelen sus propios significados. Todo no está escondido tras los símbolos, escondiéndose del censor permanentemente presente. Más bien, los sueños nos muestran cómo estamos iluminado nuestra vida: si nos sentimos atrapados, nuestros pies estarán estancados en un bloque de cemento; si nos sentimos libres, podremos volar; si nos sentimos culpables, soñaremos con pecados y culpas; si estamos ansiosos, soñaremos con objetos persecutorios.

Como ejemplo, Boss nos habla de un hombre que tenía dificultades sexuales y se sentía bastante deprimido. Durante los primeros meses de su terapia, soñaba solo con maquinarias (algo no poco usual para un ingeniero, pero tampoco demasiado excitante). A medida que progresaba su terapia, sus sueños cambiaron. Empezó a soñar con plantas, luego con insectos (peligrosos, quizás, e incluso amenzanantes, pero al menos eran cosas vivas). Posteriormente soñó con ranas y culebras, luego con ratones y conejos. Durante algún tiempo, aparecieron cerdos.

Después de dos años en terapia, al fin empezó a soñar con mujeres. Este hombre estaba triste porque se había confinado a un mundo solo hecho de maquinarias y le tomó bastante tiempo llegar a soñar con algo tan cálido como una mujer. El punto a tomar en cuenta es que aquí los cerdos no representan nada (ni deseos escondidos, ni arquetipos o inferioridades para la teoría del terapeuta. Pertenecen al ingeniero; eran lo que su iluminación evolutiva traía a su vida en esos momentos.
Puedes encontrar la teoría de Boss en Existential Foundations of Medicine and PsychologyPsychoanalysis and Daseinsanalysis contrasta con la terapia existencial y freudiana. Su trabajo sobre análisis de los sueños podemos encontrarlo en The Analysis of DreamsI Dreamt Last Night....

En Internet puedes hallar varias referencias al trabajo de Boss. Recomendamos: http://www.capurro.de/tucuman.html, donde se ofrece una visión más detallada, así como bibliografía del autor en castellano.



© Derechos de autor, C. George Boeree, 1998
© Derechos de traducción, Rafael Gautier, 2003