Cambio y evolución en el lenguaje

Dr. C. George Boeree
Traducción al Español: Claudio Fuenzalida


 
Las lenguas cambian, generalmente muy lentamente, a veces muy rápidamente. Existen muchas razones por las que una lengua puede cambiar. Una razón obvia es la interacción con otras lenguas. Por ejemplo, si una tribu de gente realiza intercambios con otra, empezarán a utilizar palabras específicas y frases para los objetos de intercambio. Si una tribu pequeña, pero poderosa, subyuga a una tribu más grande, se observa que la lengua que habla la elite a menudo muestra la influencia de la constante interacción con la mayoría, mientras que la lengua de la mayoría importa vocabulario y estilos de habla de la lengua de la elite. A menudo una o la otra desaparece, dejando atrás a un profundamente alterado "vencedor". Un ejemplo de este suceso es el Inglés: el Francés Normando de los conquistadores desapareció hace bastante tiempo, pero no sin antes cambiar el Anglo-Sajón en un Inglés altamente afrancesado.

Si un grupo de gente se encuentra aislado en islas o montañas su lengua puede cambiar, aunque por cierto muy lentamente; pero de todas maneras cambia. Por ejemplo, en las tierras altas de Papua Nueva Guinea hay muchas docenas de lenguas, cada una bastante diferente de la de sus vecinos. Pero son aparentemente el resultado de un aislamiento por largo tiempo, más que de una influencia mutua. Lo mismo ha ocurrido en las montañas Caucásicas entre Rusia, Turquía e Irán.
Los mecanismos más lentos de cambio parecen incluir la “batalla” entre simplicidad y expresividad: queremos que nuestros idiomas comuniquen tanta información como sea posible, y además hacerlo de manera económica. Queremos que nuestros idiomas sean ricos, pero concisos. ¿Cuantas preposiciones o casos necesitamos? ¿Cuántas es mucho? ¿Cuántas formas verbales necesitamos, y cuántas filtra el cerebro? ¿Cuántos sufijos, prefijos e irregularidades pueden los niños aprender antes de que comiencen a simplificar? ¿Qué combinaciones de sonidos son fácilmente pronunciados y fácilmente entendidos?, etc.

Un aspecto sorprendente del cambio y evolución de las lenguas es la influencia de la moda, e incluso de idiosincrasias individuales. A pesar de que la historia es apócrifa, algunos dicen que la pronunciación de la z en el español de Castilla se debió a que los cortesanos imitaban el ceceo de un joven rey. En mi propia familia, nos referimos a Navidad como wikis, por la incapacidad de uno de los niños de decir Navidad (Christmas). Imagina que somos parte de un pueblo tribal estrechamente unido; si a estos les hubiese gustado tanto el cambio como nos gustó a nosotros, ¡la palabra Christmas se transformaría a Wikies dentro de una generación! Esto ha ocurrido probablemente millones de veces en la historia humana.

Veamos ahora un ejemplo real de una gente muy influenciable:

Alrededor del 5000 AC, entre el valle del río Danubio y las estepas de lo que ahora corresponde a Ucrania, vivían pequeñas tribus de granjeros primitivos que hablaban la misma lengua. Cultivaban centeno y avena, y criaban cerdos, gansos y vacas. Pronto se convertirían en la primera gente de la tierra en amansar caballos salvajes, un logro que los convertiría en una importante parte de la historia por miles de años, y su proximidad a la culturalmente avanzada gente de Asia Menor – lo que ahora es Turquía – les permitiría aprender el trabajo en metales inventado ahí, comenzando con el cobre.

Empezando el 3000 AC, esta gente se esparciría en Europa y en las estepas rusas. Alrededor del 1500 AC continuarían hacia Persia e India, incluso tan lejos como el occidente de China. Luego, en los últimos 500 años, se esparcirían hacia las Ameritas, Australia, las Islas del Pacífico y partes de Africa. Ellos llevarían su idioma con ellos, aunque gradualmente mutaría en cientos de lenguas mutuamente ininteligibles, incluyendo Inglés, Alemán, Francés, Español, Ruso, Persa, Hindi y muchos más.
Al examinar los antiguos ejemplos de lenguas modernas y clásicas tales como el Griego, Latín y Sánscrito, los lingüistas han podido reconstruir una elaborada suposición de cómo era la lengua de esta antigua gente. Llamaron a esta lengua Proto-Indo-Europea. El trabajo hecho en esta reconstrucción del Proto-Indo-Europeo llevó a realizar esfuerzos por reconstruir otras lenguas prehistóricas también.

Para ilustrarte cómo estos lingüistas lo hicieron, comencemos con un ejemplo simple: el Italiano, Español, Portugués, Francés y Rumano provienen del Latín, del cual aún existen muchos registros. Palabras con –ct- al medio en Latín cambiaron de un modo sistemático, tal como sigue: 

Latín Italiano Español Portugués Francés
dicto detto dicho dito dit
lacte latte leche leite lait
lecto letto lecho leito lit
nocte notte noche noite nuit
     
Así, una regla podría ser que una combinación “difícil” de letras como -ct- cambie de ciertas formas para llegar a ser más “simple”. En la mayoría de las lenguas descendientes, sólo se convirtió en -t-; en Español se convisrtió en –ch-. Otro ejemplo: las palabras que comienzan con pl-, cl-, o fl- en Latín también cambiaron de una manera sistemática. En este caso, las combinaciones de consonantes iniciales se “simplificaron” de diversas formas en Italiano, Español y Portugués, pero permanecieron igual en Francés. En Italiano, la l se convirtió en i, en Español se convirtió en ll, y en portugués se convirtieron en ch (pronunciada como sh):


Latín Italiano Español Portugués Francés
pleno pieno lleno cheio plein
clave chiave llave chave clef
flamma fiamma llama chama flamme

La relación entre las lenguas germanas son a menudo obvias, y los linguistas han reconstruido lo que ellos llaman Proto-Germánico:

Inglés Holandés Alemán Danés Noruego Sueco Islandés Español
book boek buch bog bok bok bók libro
come komen kommen komme komme komma koma venir
drink drinken trinken drikke drikke dricka drekka beber

Y entre las lenguas eslavas, las relaciones son aún más obvias, y se ha reconstruido el Proto-Eslavo:

Ruso Bieloruso Ucraniano Polaco Checo Eslovaco Esloveno Serbio-Croata Macedónico Búlgaro
mat' maci maty matka matka matka mati mati majka maika
vera vera vira wiara vira viera vera vjera vera vjara
son son son sen sen sen sen san son san
 
Con el tiempo, los lingüistas aprendieron los patrones del cambio, y los han usado para reconstruir las lenguas de cuyas versiones originales no existen ya registros – tales como el Proto-Indo-Europeo -. Ellos son capaces de usar algunas de las versiones más antiguas de las diferentes ramas de las lenguas Indo-Europeas como una base:

Inglés Sánscrito Griego Latín Gaélico Antiguo Gótico Lituano Eslavo Antiguo
four chaturtha tettares quattuor cethair fidwor keturi chetyre
five pancha pente quinque coic fimf penki peti
mother maatra mater mater mathir modhir mote mati
brother bhrataa phrater fratera brathair brothar brolis bratu
                   
Estos ejemplos están lejos de estar obviamente relacionados, pero de hecho sí lo están. Las palabras para hermano son más claras que los otros ejemplos. Se puede apreciar que el primero sonido varía entre b, bh (b aspirada), ph (p aspirada), y f.  La primera vocal varía entre a y o. La consonante intermedia varía entre t y th. En todas, menos en las últimas dos lenguas, las palabras terminan en alguna variación de ar o er. Fíjate que los ejemplos incluyen Sánscrito (ancestro de las lenguas de norte de la India), Griego, Gaélico Antiguo y Lituano. La lengua Gótica es la versión más antigua registrada de las lenguas germanas, y el Eslavo Antiguo, la más antigua de las lenguas eslavas.

Existen aún más lenguas relacionadas, incluyendo el Albanés, Armenio, las lenguas de Irán, y muchas lenguas que se extinguieron.
Al examinar el patrón en muchas lenguas y palabras, los lingüistas han reconstruido las formas Proto-Indo-Europeas de éstas y muchas otras palabras:

Proto-indoeuropeo Español
kwetwer cuatro
penkwe cinco
mater madre
bhrater hermano

Por algunos ejemplos más, aquí están los números proto-indo-europeos reconstruidos del 1 al 10:

oino, dwo, trei, kwetker, penkwe, sweks, sept, oktou, newn, dekm.

¿Te parecen vagamente familiares?

Los lingüistas han reconstruido otras Lenguas Proto de otras familias lingüísticas. Algunas, como las lenguas polinésicas, son relativamente fáciles, en tanto estas lenguas divergieron sólo alrededor de 1000 años atrás. Pero existen otras casi imposibles de reconstruir, ya sea porque carecen de material escrito antiguo, o porque ni siquiera se ha podido establecer con certeza que sean lenguas de una misma familia.

Muchos lingüistas creen que es difícil reconstruir una lengua más allá de 5000 años, incluso con un buen número de vocabulario sobre el cual trabajar. De hecho, muchos sugieren que desde 10.000 años, los cambios que ocurren son tan profundos que no se puede establecer ninguna conexión clara entre dos lenguas que se separaron esa cantidad de tiempo atrás.

¡Pero decir que algo es imposible nunca antes nos ha detenido! Algunos otros lingüistas han hecho el salto y han usado algunas herramientas estadísticas especializadas para proyectar retrospectivamente una Lengua que (supuestamente) es el ancestro no sólo del Proto-Indo-Europeo, sino que también de los grupos lingüísticos Afro-Asiáticos (Ej. Árabe, Hebreo y Egipcio Antiguo), Urálicos (Ej. Finés y Húngaro), Altaico (Ej. Turco y Mongolés), Dravídico (las lenguas del sur de la India), Coreano, Japonés, las lenguas orientales de Siberia y ¡las lenguas Eskimo-Aleut!

Ellos llaman la reconstrucción Nostratica (significando “nuestra”), y sugieren que pudo haber existido hace unos 15.000 a 20.000 años. Algunos ejemplos de palabras que pudieron haber sido partes del Nostrático incluyen  küjna (perro), p'at (pie), haku (agua), y küni (mujer). Tal vez reconoces algunas de estas palabras, como canino, pedicure, ascua, y queen (reina).

Para hacer esto, algunos linguistas han usado diferentes conjuntos de técnicas. En lugar de mirar a una vasta colección de palabras, ellos miran a una colección más pequeña de palabras que han mostrado cierta estabilidad en lenguas tales como las del Indo-Europeo. Luego miran  a patrones estadísticos en un gran número de lenguas. Son técnicas como éstas que han permitido a los lingüistas sugerir, por ejemplo, que la mayoría de las lenguas indígenas de Norte y Sudamérica son parte de un grupo que han llamado Amerindio.

¡Pero esperen! ¿Por qué detenerse aquí? Echen un vistazo a las palabras reconstruidas del Proto-Amerindian por perro, pie, agua y mujer: akuan, pet, haku, and kuna. Se parecen a las Nostrático: küjna, p'at, haku, and küni, ¿o no? Algunos lingüistas van mucho más allá y sugieren que de hecho se puede reconstruir al menos un poco de lo que llaman Proto-Mundo, que presumiblemente existió 100.000 años atrás. Kuajn sería la palabra por perro en Proto-Mundo; pat sería pie; haku sería agua; kuni sería mujer. Suena increíble, y eso es lo que la mayoría de los lingüistas piensan: increíble. ¡Hay demasiadas oportunidades para falsear similitudes y distorsionar los resultados.

Sin embargo, es probable que una vez haya habido sólo una lengua, una con un vocabulario limitado y con reglas simples para combinar palabras y formar oraciones. Mientras la necesidad aumenta, el vocabulario se expande, al combinar viejas palabras o inventar nuevas, y las reglas se pueden volver más y más detalladas. En algún punto, mucho tiempo atrás, el vocabulario y la gramática habrían aparentemente “despegado”: todos los lenguajes hoy en día parecen ser iguales en su capacidad de expresar los matices y complejidades de la vida humana.


 
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